Este martes, Sanidad decretaba medidas especiales de nivel 3 en La Solana (Ciudad Real) y, con ello, se eliminaba el acceso al interior de bares y restaurantes de la localidad y se limitaba el aforo en terrazas.

Ante las nuevas restricciones,Isidro Briones, un joven de 21 años que trabaja en una cafetería familiar regentada por su padre, ‘El paraíso del helado’, ha buscado una solución de emergencia para mitigar el nuevo "hachazo" a sus ventas, instalando mesas camilla con brasero y faldas de tela en la terraza de su local. "Las teníamos en casa de la abuela y las hemos acondicionado de un día para otro", ha comentado.

Briones ha señalado que esta idea, "a la vieja usanza", está teniendo "muy buena acogida" y está siendo "llamativa" para los solaneros que pasan por el establecimiento, situado en pleno centro urbano.“Ven el sitio un lugar acogedor y, en cierta parte, innovador”. Según ha indicado, "ya ha tenido un gran éxito en redes sociales, donde los usuarios han valorado positivamente esta decisión, mostrando su apoyo al establecimiento".

"Ahora se espera que, dentro de las gélidas temperaturas de este mes, podamos dar el servicio a los clientes siempre cumpliendo la normativa sanitaria estipulada", ha insistido el joven hostelero. De igual manera, Isidro Briones ha manifestado que, dentro de las restricciones, están afrontando la situación "lo mejor posible, esperando que baje el número de contagiados en el municipio".

Briones ha animado al resto de hosteleros a sumarse a iniciativas de este tipo y, sobre todo, les ha pedido fuerza y paciencia. “Sabemos que son días de salir, consumir y mucho movimiento, pero entre todos debemos poner nuestro granito de arena y solucionar esta situación”, ha concluido.