El presidente regional ha lanzado esta propuesta durante la celebración del acto institucional organizado en Villacañas (Toledo) con motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, en el que ha recordado que Castilla-La Mancha ha sido pionera en sus leyes contra la violencia machista y, por ejemplo, reconoce que los hijos cuyas madres sean asesinadas por sus parejas sean reconocidos como huérfanos y puedan recibir ayudas.

A su parecer, "será imposible acabar con la violencia del hombre a la mujer si no se ampara un modelo social que luche contra todo tipo de violencia" y por ello ha propuesto establecer la promoción de unas pautas de comportamiento de hábitos no violentos en España, que sirvan para penalizar y poder perseguir a quienes difunden valores violentos, porque "es muy complicado luchar solo contra un tipo de violencia".

También ha denunciado que "hay mucha gente que al hablar hace daño" y que "no se puede decir cualquier cosa" y, en alusión a las palabras que dedicó el parlamentario de ERC Gabriel Rufián al ministro de Asuntos Exteriores, Josep Borrell, en el Congreso de los Diputados, ha dicho que del mismo modo que se podría sancionar a un funcionario por ese comportamiento, "eso se tendría que trasladar a la clase política".

"Quien se alimenta en la violencia, termina castigando a su mujer"

Por todo ello, ha considerado que una sociedad "moderna y avanzada" como la española y la castellano-manchega "no tiene que tener miedo" de proteger a la sociedad de la violencia, porque "quien se alimenta en la violencia, termina castigando a su mujer, a su pareja", ha resumido el presidente autonómico.

Asimismo, ha resaltado -con motivo del 40 aniversario de la Constitución española-, que el artículo 14 de la Carta magna recoge la igualdad de todos los ciudadanos y ha reivindicado "la igualdad absoluta" entre hombres y mujeres.

El presidente regional ha resaltado que Castilla-La Mancha se toma "en serio este tema" y por ello ha afirmado que, "con el pesar de cada muerte, de cada víctima, al menos se puede celebrar que esta región fue la primera en hablar del maltrato" con la aprobación de la primera ley autonómica sobre el asunto y ahora "se ha vuelto a colocar a la cabeza de toda España con la ley más avanzada y más moderna" del país.

Araceli Martínez y la nueva ley

También la directora del Instituto de la Mujer de Castilla-La Mancha, Araceli Martínez, ha celebrado la aprobación por unanimidad de esta ley que, entre otras medidas, recoge ayudas para los hijos cuyas madres fallezcan a manos de sus parejas y la implantación de una asignatura de igualdad, por lo que ha defendido que el hecho de que ya estén en marcha la mayoría de las medidas incluidas implica que la ley está dotada presupuestariamente.

Martínez ha pedido reflexionar sobre la violencia de género y sobre las víctimas, no solo las fallecidas que "son lo más duro", sino también las que "sufren el maltrato cotidiano" y ha lamentado que este tipo de violencia existe porque existe el machismo, "un fuerte sistema ideológico que impregna y sustenta la sociedad" y que está "tan interiorizado" que no se percibe "su existencia y su influencia".

Contra el amor romántico

Asimismo, ha alertado de los riesgos del "mito del amor romántico", que lleva a que a "chicas jóvenes les revisan sus móviles sus novios, les controlan lo que escriben en redes sociales, les alejan de sus amigos, y luego les dicen que es porque les quieren".

"Ello ocurre porque desde pequeñas dicen que solo seremos mujeres completas si encontramos a nuestra media naranja", ha denunciado Martínez, que ha apuntado que "no es lo mismo el mito del amor romántico que el amor" y ha advertido: "Pensar que los celos es amor y que si nos violentan es porque nos lo hemos merecido es más habitual de lo que parece".

De hecho, ha afirmado que "hay muchas chicas jóvenes que no saben que son víctimas de la violencia de género" porque han normalizado ese tipo de comportamientos, si bien ha apostado por prevenir estos comportamientos, sobre todo a través de la educación.

También el presidente de la Diputación de Toledo, Álvaro Gutiérrez, ha mostrado su apoyo a las víctimas de violencia de género y su rechazo a los maltratadores, ha destacado que la institución provincial ha puesto en marcha iniciativas contra el maltrato que han llegado a 27.000 personas y ha anunciado la puesta en marcha de talleres formativos para alumnos de Primaria y ESO sobre "relaciones sanas desde la adolescencia".

La institución provincial también trabaja en la elaboración de una guía de igualdad dirigida a la comunidad educativa, para dotar a los adolescentes de una herramienta para fomentar tolerancia, el respeto por la diversidad y prevenir conductas de violencia de género y el acoso escolar.

García Aranda y la Academia

El acto institucional ha arrancado con la interpretación a cargo de Hevila Cardeña del poema 'No era yo' de Jhoana Patiño, voz arropada por el piano de Albiano Andrés. Justo después, el alcalde de la localidad, Santiago García Aranda, tomaba la palabra como anfitrión para dar el pistoletazo de salida al acto apuntando al plural mayestático que la Real Academia de la Lengua recomienda a un orador que se dirige a un auditorio.

"Establece la RAE que el lenguaje inclusivo es incorrecto porque vulnera un principio, el de economía del lenguaje, por lo que invita a utilizar el genérico masculino plural. Hoy lo haremos en femenino. Bienvenidas todas a Villacañas", ha arrancado su alocución.

Acto seguido, ha ofrecido el compromiso de todas las villacañeras contra la violencia de género, preludio de sus palabras de agradecimiento al Gobierno regional por elegir su localidad para celebrar este acto institucional.

No ha dejado pasar la oportunidad para reclamar más financiación para estas políticas, si bien ha reconocido la inversión de la Junta para el Centro de la Mujer del municipio "tras cuatro años de recortes".

Para García Aranda, la obligación de celebrar un día como éste es "reconocer un fracaso de toda la sociedad". "Es algo que debe comprometernos a todas", ha enfatizado, abogando por comenzar la lucha por una verdadera igualdad de género.