Digital Castilla

Digital Castilla

El campo DESARROLLO RURAL

Asaja CLM señala la agricultura y la ganadería como las mejores opciones contra la despoblación

28 octubre, 2020 17:20

Asaja de Castilla-La Mancha ha destacado la agricultura y la ganadería como "la mejor opción" para luchar contra la despoblación e incentivar el desarrollo del medio rural.

El secretario general de la organización agraria, José María Fresneda, lo explicaba así en la última reunión del Consejo Agrario en la que el único punto del orden del día fue el anteproyecto de ley de medidas económicas, sociales y tributarias frente a la despoblación y para el desarrollo del medio rural en Castilla-La Mancha, según ha informado la organización agraria en nota de prensa.

Asaja CLM ha presentado sus observaciones y aportaciones al anteproyecto y ha remitido un escrito al vicepresidente de Castilla-La Mancha, José Luis Martínez Guijarro, y al consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, destacando la esencialidad de la agricultura y la ganadería y la importancia de apostar por el sistema productivo de la región, del que se desprenden miles de puestos de trabajo directos e indirectos y garantizan el desarrollo económico de los pueblos.

La organización agraria considera que la pérdida de población y el envejecimiento de la misma se produce allí donde escasea el recurso que más riqueza genera: el agua. Por eso, cualquier normativa que persiga el objetivo de revitalizar los pueblos debe tener en cuenta sus necesidades hídricas. En este sentido, desde Asaja CLM han pedido medidas para poner en marcha los regadíos de interés regional aprobados, así como para posibles proyectos futuros.

Por último, las observaciones presentadas también recogen la importancia de seguir apostando por las líneas del Programa de Desarrollo Rural (PDR) que han resultado eficaces para el desarrollo de la economía rural, como la creación de empresas, las inversiones en explotaciones agropecuarias o las ayudas agroambientales, y ha pedido que se implanten nuevas medidas económicas, sociales y tributarias concretas y con partidas presupuestarias asignadas y definidas, imprescindibles para cumplir con el objetivo de frenar la despoblación en las zonas rurales.