Capilla Sixtina

Vientos impredecibles

8 enero, 2019 00:00

¿Qué vientos soplarán en los próximos años? Se dice de los fenómenos meteorológicos de largo plazo, como de los políticos, que son imposibles de prever. Sin embargo, la impresión en estos inicios del 19 es que el clima anda revuelto y no existen parámetros fiables para prevenir catástrofes. Una parte significativa del mundo vive en crisis, mientras los partidos de ultra derecha avanzan. En Suecia, un país del Norte  que  se envidia desde el Sur, tras las elecciones a comienzos de septiembre, no se ha conseguido formar gobierno. Ganaron los socialdemócratas sin mayoría suficiente y apareció, con representación importante, un partido de la extrema derecha. Este tipo de partidos, cuando surgen, trastocan los modelos de actuaciones y  predicciones. El Brexit, a día de hoy, continúa en “territorios inexplorados”, en expresión de May. Los vientos del Norte introducen variables que no sabemos cómo afrontar. En Francia, los “chalecos amarillos” amenazan con mantener en jaque al país. Alemania da indicios de haber capeado el temporal por el anuncio de Merkel de no presentarse a las siguientes elecciones. Es una tranquilidad aparente. Bajo la superficie quieta fluyen corrientes de fuerzas indefinidas. En Italia gobierna la ultraderecha, Salvini, en una alianza con la izquierda, Di Maio, por ahora, incalificable. De los antiguos países excomunistas, mejor no hablar. Los vientos del Este también soplan revueltos.

En el recorrido europeo llegamos a España. Donde continuamos con los mismos problemas territoriales de más de cien años. Cataluña desestabiliza el día a día desde hace un siglo e impide cualquier previsión de futuro. Es más, se anuncian tiempos perores. Quim Torra ha hablado de la “vía eslovena” y un tal Antoní Comín ha afirmado que se necesitan vidas sacrificadas. La vía eslovena supuso una guerra y varios muertos declarados. Y para dificultar más cualquier previsión, un partido de  extrema derecha ha obtenido representación en un Parlamento Autonómico: 12 diputados. Los que se necesitan para sacar a los socialistas del Gobierno  de Andalucía. Saben que impedir que el PSOE acceda al gobierno provocará en ese partido grandes tensiones internas y borrascas interiores con resultados de difícil medición. Claro, que si PP y Ciudadanos no consiguen llegar al Gobierno en sus formaciones surgirán huracanes de potencia insoportable. Así que continuarán “blanqueando” a Vox, un partido de  extrema derecha que parecía no existir.  Los vientos del Sur no traen buenos presagios.

Se cumplen  cien años  de la República de Weimar. Tras el colapso de diversas instituciones, entre ellas la monarquía, la República suponía la implantación de un sistema democrático en Alemania. Sirvió también para frenar el avance de la revolución rusa que cercaba Baviera. La República se votó por primera vez en abril de 1919. Se formó un gobierno de coalición de tres partidos. En catorce años  se sucedieron  diecisiete gobiernos. La inestabilidad fue lo habitual. En 1933 la República de Weimar se consideró incapaz de encontrar una salida a la desestabilización endémica. Llegó al Gobierno a un tipo llamado Adolfo Hitler. En Italia, gobernaba Mussolini. En España, tras la debacle de la monarquía, se proclamó la República en 1931. Hitler acabó con la República de Weimar. En 1936 un golpe de Estado cerraba con sangre los años de la segunda República en España. Después se sucederían “tempestades de acero” y ziklón B. Los hombres no se imaginaban capaces de tanta maldad. El clima pareció cambiar drásticamente. Un frío glaciar se instaló en Europa y muchos lugares se convirtieron en “tierras de sangre”. Los vientos, como la política,  suelen ser impredecibles. El mundo, como se viene anunciando, es más confuso e incierto que hace tres o cuatro años.