La Reina Sofíase ha convertido este sábado, Día Internacional de la Limpieza de Playas, en una voluntaria más y ha participado en la recogida de residuos en la playa deRincón de la Victoria (Málaga) para luchar contra labasuraleza, la basura en lanaturaleza.

Pasados unos minutos de la una del mediodía, doña Sofía ha llegado a esta localidad malagueña, vestida con ropa cómoda y protegida con la preceptiva mascarilla, entre el asombro de los bañistas que disfrutaban de un día de playa y que desconocían la celebración de este acto.

Lo cierto es que con esta aparición ha vuelto a marcar distancia sobre las formas de proceder de cada uno de los miembros de la Casa Real. Y es que la Reina Sofía ha vuelto a dar ejemplo con una aparición pública que contrasta con la última imagen del Rey Juan Carlos que está dando la vuelta por los medios de comunicación, en la que se le ve hace unos años en una actitud desenfada con el hijo de Corinna de barbacoa.

Precisamente, las últimas revelaciones de esta última en una entrevista iban dirigidas con la anterior reina, a la que acusaba de tener prisa por ver a Felipe en el trono. En sus confesiones, el Rey Juan Carlos le habría transmitido a Corinna que Doña Sofía "tiene mucha más influencia sobre él que sobre mí", ofreciendo una imagen de manipuladora con ambición por controlar la institución que no se corresponden con la trayectoria mostrada durante décadas por una de las figuras de la Casa Real más queridas por los españoles.

Para desmentir estas acusaciones, doña Sofía ha vuelto a hacer lo que más le caracteriza. Con mascarilla, guantes, una bolsa de basura y ropa de faena ha echado una mano a los voluntarios que cooperan para mantener limpio el entorno de las playas españolas y, de paso, ha dado con el ejemplo una nueva lección de cómo debe cuidarse una institución como la Casa Real.