El Comentario

La OTAN, Trump y Europa

19 julio, 2018 00:00

Desde antes incluso de convertirse en el 45 Presidente de los Estados Unidos de América, Donald Trump ha venido criticando el escaso gasto en Defensa que hacen sus aliados de la OTAN. En un lenguaje al que se está muy poco acostumbrado en el mundo diplomático, ha llegado a decir que Europa debe mucho dinero a EEUU que, según dice, soporta más del setenta por ciento del gasto de la Alianza. El martes publicó un mensaje en su cuenta de Twitter en el que llamaba literalmente morosos a varios países europeos. ¿Es eso cierto? ¿Hemos dejado de pagar aquello a lo que estábamos obligados?

Como es sabido, la OTAN es una organización nacida en 1949 con el fin de proveer asistencia mutua a sus miembros en caso de conflicto armado. Conforme al artículo V del Tratado, el ataque que se produzca contra uno o varios de los Estados Miembros en territorio europeo o americano se considerará un ataque contra todos los aliados, que ayudarán al agredido empleando incluso la fuerza armada. De acuerdo con el Tratado, cada país mantiene su soberanía y decide cuáles son las capacidades militares de las que quiera equiparse. Nada se dice en su texto sobre el monto del gasto en Defensa o sobre la composición o dotación de sus fuerzas armadas. El compromiso es ayudarse con lo que cada uno tenga, poner en común la fuerza militar que cada uno posea.

Para que esa acción combinada de los aliados pueda ser eficaz, la OTAN decidió organizar unas estructuras comunes, unos cuarteles generales capaces de asumir el mando y control de las operaciones militares, y unas agencias especializadas. Todo eso tiene un coste como es lógico. El presupuesto total de la OTAN para 2018 alcanza los 2.370,8 millones de dólares, que se pagan por los países miembros conforme a una fórmula basada en el PIB de cada uno respecto del PIB total del conjunto. En este momento la aportación de EEUU al presupuesto de la OTAN es del 22,13%, y la de España es del 5,55%. Teniendo en cuenta que el PIB de EEUU en 2017 fue de 17.164 billones de euros y el de España de 1.163 billones, vemos que EEUU paga “solo” cuatro veces más que España, aunque su PIB sea casi quince veces mayor.
Lo que sí es cierto es que los EEUU han decidido dotarse de unas fuerzas armadas colosales, y para sostenerlas el Congreso les asigna la astronómica cantidad de 625.000 millones de dólares, el doble de todo el gasto del Estado en España. Como soy español y no estadounidense, no entro a valorar si los 750.000 funcionarios civiles del Departamento de Defensa contribuyen mucho o poco a la defensa de su país (1,3 soldados por cada funcionario civil); o algunos otros aspectos sobre la eficiencia del gasto. También ellos deciden qué fuerzas destinan a regiones no cubiertas por el Tratado del Atlántico Norte; a sus bases en Asia o a su flota del Pacífico, por ejemplo. Es su dinero, ellos lo generan y ellos se lo usan como consideran oportuno. Pero lo que sí creo es que lo que gasten y cómo lo gasten no puede vincularnos a los demás.

Pienso firmemente que España gasta poco en su defensa. Dedicamos el 0,93% del Presupuesto a algo tan esencial como es proteger el territorio, la seguridad y la libertad de nuestra Nación. No se trata de gastar por gastar, sino de que en este momento carecemos de algunas capacidades militares que son imprescindibles para la seguridad nacional, y con ese 0,92% no da para adquirirlas y sostenerlas. La Unión Europea ha decidido que los países miembros lleguemos a un gasto en defensa del 2% del PIB, como antes hiciera la OTAN. Debemos hacerlo porque nos conviene a los españoles, porque es lo prudente, porque la seguridad es la base sobre la que asienta todo lo demás. Pero lo que debe quedar claro es que ni España ni el resto de nuestros socios europeos, aliados también en la OTAN, le debemos ni un céntimo a los EEUU. Todos hemos pagado nuestras facturas y nuestros parlamentos son tan soberanos como el Congreso de los EEUU para decidir cuánto debemos dedicar cada uno a protegernos.

La aportación de los EEUU a la consolidación de Europa como un espacio de democracia y libertad ha sido esencial. Sin la disuasión que proporcionaron las fuerzas americanas desplegadas en Europa muy probablemente nuestro continente habría caído bajo la bota soviética como antes cayó bajo la bota nacional-socialista. La OTAN ha sido el instrumento imprescindible para que ese vínculo transatlántico siga firme y sea eficaz, y continúa haciendo fuertes a los países a ambos lados del océano. Debemos tomarnos en serio nuestra defensa por el bien de los españoles. Pero no porque nadie diga que le debemos lo que no le hemos pagado, porque eso es sencillamente falso.

Agustín Conde Bajén. Ex Secretario de Estado de Defensa