El Socuéllamos jugará la próxima temporada en Segunda RFEF. A falta de una jornada para el final del campeonato, el equipo socuellamino ha rubricado una última fase de campeonato prácticamente perfecta que le sirve para ganarse un puesto la próxima temporada en una de las dos categorías en la que se desdoblará la actual Segunda División B.

Una vez más, el equipo de Josico se hizo fuerte en su campo y sacó petróleo del balón parado ante un Getafe B que pese a estar descendido no vendió su piel barata. Tres faltas botadas por Kike Domínguez eran rematadas por Ramón, Morros y Fran Cortés para desatar la alegría en el Paquito Giménez tras una temporada muy complicada en lo deportivo y también en lo personal por el fallecimiento de uno de sus directivos hace pocas semanas.

Desde el comienzo, los unionistas salieron decididos a no dejarse sorprender. Megías en un par de ocasiones y más tarde Abel Suárez en un remate que paraba Dos Santos, intentaban encauzar el partido por la vía rápida. Por su parte, los visitantes también lo intentaban en un disparo de Keita que se iba algo y en un golpeo de falta.

En esas andaba el partido cuando en el 31' el Socuéllamos consiguió abrir la lata. La zurda de Kike Domínguez ponía en juego una falta que encontraba la cabeza de Ramón, quien se encargaba hacer el 1-0 que encauzaba el choque.

La lógica tranquilidad que daba este gol permitió al Socuéllamos tomarse el partido de otra manera, con mucha más calma, en la recta final de la primera parte y el comienzo de la segunda. Por si fuera poco, el Getafe B no era capaz de inquietar más allá de un acercamiento en los últimos minutos del primer acto que solventó Javi Sánchez.

Con el paso de los minutos, en el segundo periodo los locales fueron despertando sabedores de la exigua ventaja que les daba un solo gol. Tras varios acercamientos, Arnaiz gozaba de una ocasión franca en un remate desde el borde del área que se marchó lamiendo el palo de la portería de Dos Santos.

Este aviso significó la antesala del segundo. Otra vez en el 31', pero esta vez de la segunda mitad, Kike Domínguez sacaba brillo a su bota en una falta en tres cuartos de campo que colgaba al área para que Morros, con suspense, rematara de espuela haciendo el gol de la tranquilidad.

El último tramo del partido, con todo solventado y el calor apretando en el Paquito Giménez, sirvió para que el Socuéllamos pudiera celebrar la consecución de este importante objetivo. Por si fuera poco, ya en el descuento Kike Domínguez volvía a telegrafiar un gran centro de falta que en esta ocasión servía a Fran Cortés para hacer el tercero y desatar la alegría en todo Socuéllamos.

¡Enhorabuena!