Si tuviéramos que situar el baremo de la alegría de este lunes en los lugares de Castilla-La Mancha, el primer puesto se lo llevaría Talavera sin ninguna duda. El equipo cerámico lograba ante el Olimpic de Xátiva el ascenso que le permite volver a jugar en Segunda División B una temporada después.

Pero después de la Ciudad de la Cerámica, a buen seguro que donde mejor ha sentado este logro es en Las Pedroñeras. El equipo ajero, arrastrado por los descensos de La Roda y Socuéllamos confirmaba con este ascenso su presencia en Tercera División una temporada más. Lo mismo ocurre un escalón más abajo con el Daimiel Racing, damnificado por este arrastre que se mantendrá en Preferente.

De todas maneras, para que las categorías mantengan la estructura deportiva que marcó la temporada, tendría que producirse otro ascenso a Segunda División. De ahí que seguidores de Toledo B y Corazón de Titán sean ahora mismo unos hinchas más de Conquense y Villarrobledo.