El alcalde de Campo de Criptana, Antonio Lucas-Torres, ha suscrito con el presidente del Comité de Empresa de los trabajadores municipales, Ignacio Díaz-Parreño, la firma del convenio colectivo tras ocho años de negociación

De esta manera y una vez suscrito el documento, el personal laboral del Ayuntamiento verá satisfechas muchas de las demandas que no recogía el anterior convenio, que data nada menos que de 2001, hace ¡¡diecisiete años!! Lo relevante, además, es que han estado de acuerdo todos los sindicatos con representación entre el personal del Consistorio, lo que supone un nuevo hito en la provechosa legislatura de este atípico alcalde ciudadrealeño. En ese sentido, Lucas-Torres agradecía a todos los miembros del comité de personal  la implicación y el compromiso que han mantenido a lo largo de las negociaciones para dar como resultado un ‘convenio que satisface a todas la partes’. 

El primer edil criptanense ha recordado que en menos de dos años se han conseguido "grandes logros" en materia laboral para todos los trabajadores municipales, después de que en 2017 llegara el entendimiento que desembocó en la firma del Acuerdo Marco que rige la labor de los funcionarios.

Junto al acuerdo recién rubricado, se suman dos pactos que "se completarán" el próximo año con la aprobación de la nueva relación de puestos de trabajo.

Para Antonio Lucas-Torres es fundamental aprobar este último documento para seguir garantizando los mejores servicios a los ciudadanos. "Somos uno de los ayuntamientos que más servicios presta a los ciudadanos y uno de los que menos personal tiene. Una relación de puestos que sin embargo no merma la calidad y la atención que los trabajadores dan a los vecinos gracias su profesionalidad y a su voluntad", ha asegurado.

Por su parte, el presidente del comité de empresa, J. Ignacio Díaz-Parreño, ha asegurado que “tras años de negociaciones hoy es un gran día para todos y especialmente para los trabajadores que ven cumplidas muchas de sus peticiones”. Además ha agradecido la implicación y la “buena voluntad” que desde el Ayuntamiento se ha tenido para hacer realidad este documento, dejando en el cajón el que regía desde el año 2001.